Francisca Sfeir cumplió un sueño la noche del sábado: tuvo la oportunidad de telonear a Pimpinela en el Sun Monticello. Un show redondito donde la actriz y cantante demostró que está para grandes escenarios.
“Fue increíble, un momento épico para mi historia. Me sentí respaldada por un gran equipo y pude sentir la magia de estar en un escenario tan importante”, nos comentó la Fran aún con la adrenalina a full por una noche donde la barra la tapó a cariño.
-¿Pudiste compartir con los hermanitos Galán?
- Tuve la oportunidad de cruzarme en bambalinas con ellos, me dieron sus felicitaciones, me desearon suerte y también después del show, estaban muy sorprendidos.
- Te deben haber pedido hasta una selfie los “Pimpi”.
- Jajajá. Mucha gente se quiso sacar fotos conmigo, pero con los Pimpinela intercambiamos discos. Yo agradezco su generosidad, ya que me prestaron parte de su espacio.
- Supimos que la barra no tardó en enganchar de una con tu show.
- La gente tarareó las canciones nuevas, aplaudió, grabaron. Me dieron mucho cariño, niñas me abrazaban con mucho aprecio, como que no me querían soltar. El impacto que ha tenido “Pobre Gallo” (ver recuadro) es innegable en mi carrera, pero lo que más me emocionó es que muchas personas me dijeron que fueron especialmente a verme.
PASAJES
Sfeir ya tiene las maletas y pasaportes listos para partir esta semana a México, donde estará tres semanitas promocionando su disco y sencillo “A dónde va el amor” por Ciudad de México y sus alrededores. “Este viernes que viene ya me voy a una gira de promoción enorme. Me han contado algunas sorpresas que pueden ser gigantescas, escenarios en los que tendré la oportunidad de cantar, galas en las que estaré y varios programa populares de allá”.
-¿A futuro, te interesaría radicarte en la tierra del tequila?
- Tengo harta fe en mi país, siempre lo he dicho. Desde que empecé en este camino tuve discusiones familiares o con amigos que me decían que tenía que irme, yo quiero ser feliz aquí.
- Así me gusta, bien patriota.
- Siento que el arraigo es muy importante. Yo he vivido tres veces fuera y esa necesidad de hablar en tu idioma, de estar en tu hogar se siente mucho. Creo que es compatible poder hacer algo más arraigo a mi país, pero con opciones de viaje.