George Clooney se puso goloso en mala

La estrella de 50 años,quien este año se alzó con el Globo de Oro por su trabajo en "Los descendientes", se quedó muy poco tiempo en la fiestoca posterior a la gala de entrega, situación que llamó mucho la atención.   ¿Por qué?  Porque el galancete madurón siempre se queda hasta que las velas no ardan en los eventos del jet set y ahora no estuvo más de quince minutos.

Todos pensaron que Cloney se iría directo a dormir tranquilito a su casita, jajajá sí claro.  Obviamente tenía algo mucho mejor que hacer, ya que había organizado una juerga privada a la que sólo podrían asistir sus amigos más íntimos.

Lamentablemente, lo que les esperaba no era una noche desenfrenada, sino más bien una comilona de aquellas, ya que hizo traer más de 100 promociones de varios McDonals cercanos, cuek.

Es que el George se ha convertido en un adicto a las hamburguesas con quesos y anda gritando igual que nuestro compatriota ¡quiero mi cuarto de libra A-HO-RA! a cada rato.

Y es verdad aquello, ya que sus asistentes tienen que salir a cada rato a comprar sus antojillos donde sea.

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