El inicio del concierto de los Backstreet Boys fue con la misma parafernalia de cuando arrasaban en los 90. Pero de ahí, los gringos mostraron cómo han pasado los años por ellos.
Las fanáticas que repletaron anoche el Movistar Arena con la idea de que el cuarteto iba a bailotear y canturrear como en los viejos tiempos, se quedaron con las ganas. Pero hay que decir que Brian, Howie, Aj y Nick sudaron la gota obesa tratando de dar lo mejor de ellos por sus seguidoras.
El vamos del concierto fue con bombos y platillos: La pantalla gigante comenzó a mostrar imágenes de los chicuelos y cuando comenzaron a sonar los primeros acordes de Everybody, salieron del telón de fondo.
De ahí comenzaron a emular lo que fueron, pero el físico no los acompañaba. Cantaban y bailaban tres canciones, y paraban para tomar aire con la excusa de un video. Y en los cambios de vestuario se les notaba la ponchera regalona, la que trataban de ocultar con fajas.
El show, tal como estaba anunciado, fue un recorrido por sus grandes éxitos de los 90 y comienzos de este siglo, con temas romanticones como Quit Playing Games with my Heart y I Want it that Way, o bien las que hacen bailar a todos como Everybody, Get Down y Larger than Life.
Al igual que en sus dos conciertos anteriores, el grupete vendió la totalidad de las entradas, y viene precedido de dos presentaciones tanto en Brasil como en Argentina.
