"Cometí muchos errores", asume Cristián García-Huidobro, mientras se acomoda en una de las butacas de la productora de su amigo Carlos Pinto.
Vestido en onda dominguera y con el rostro despejado, el actor que inmortalizó a Los Eguiguren y que inventó al "Humbertito", se confiesa con La Cuarta, reconociendo yayas y anunciando su regreso a las tablas tras un crudo período de rehabilitación personal.
Lo pasó mal y procura no perder la memoria, porque después del éxito en El Desjueves (La Red) y Na' que ver con Chile (Canal 13), lo perdió todo y tuvo que partir de cero.
"Cuando uno hace tantas cosas a la vez, en algún momento se tiene que complicar", resume sobre el cuático período que vivió desde que a mediados del 2004 se separó de su esposa y pasó una y otra vez por las de Quico y Caco.
No olvida cuando le dieron duro por su última temporada en Viña. "En esa carpa hubo errores de todas partes, no se pudo pagar todo, pero a ninguno se le dejó de pagar y hoy no tengo deudas con nadie (...) De hecho ya tengo mis cuentas bancarias saneadas", dice.
"Todo eso me afectó mucho. Me atacaron como a nadie y cuando me estaba recuperando en el Parque Arauco, insistieron", recordó, apuntando sus dardos a la tele: "En Primer Plano se equivocaron, fue muy grave todo lo que hicieron, me dieron como caja durante tres viernes seguidos... Por algún tipo de interés".
Luego de ese episodio, el actor buscó salidas y bailó largo rato con la fea. "Por un tiempo viví en una pieza de hotel", recuerda, destacando que recuperó la fe cuando postuló a senador por la Quinta Cordillera "para ayudar a mi amigo Carlos Ominami".
"Lo pasé mal. Viví la soledad y me hice muy amigo de la noche, lo que terminó pasándome la cuenta. Entonces vino la campaña y me reencontré con la gente".
- ¿Y ahora estás chantado?
- ¿Cómo chantado? ¿En qué sentido? Puede ser, de repente disfruto tomar una copa de vino en un bar, pero ya sé lo que significa la noche y su orquesta, porque a mí me llevó la noche y conocí todos los instrumentos... Pero volví y ya nada de eso me llama la atención.
- ¿Te lanzaste a lo rockanrolero, onda sexo, drogas y alcohol?
- Sí, hubo excesos, para qué voy a entrar en detalles. Lo perdí todo, es que hay caracteres como el mío, que tienen que cuidarse siempre del exceso.
- ¿Y Viviste una rehabilitación personal o buscaste apoyo externo?
- Tuve apoyo de algunos grupos, pero fue importante lo personal. Los nuevos caminos son posibles, pero dependen de uno. Puedes ir a 10 siquiatras, 20 clínicas, pero la decisión siempre está en uno.
- ¿Cómo te quedó el ego?
- Mejor porque viví la humildad. De hecho siento que en mi peor momento no lo tenía fuerte y muchas cosas pasaron por eso, tenía mi cabeza desordenada.
Deslenguados y Bipolares, la obra de regreso de Cristián, debutará el en el Teatro Ladrón de Bicicletas, en Dardignac 0163, Providencia.
GONZALO ROBLES, EL AMIGO QUE DEJÓ TODO POR LA NUEVA ETAPA
Cuenta García-Huidobro que aprendió a colar sus amistades, porque "cuando estás arriba todos son cercanos". Del saldo, quedó quizás su gran partner de la vida, Gonzalo Robles, a quien conoce desde cuando lo metía a su colegio (SS.CC.) para hacer rabiar a los profesores asegurando que se trataba de un compañerito nuevo. "Creemos que el reencuentro será positivo", explica Robles a pocos días de debutar con Deslenguados y Bipolares, una obra donde apelarán a sus traspiés y revivirán a los ya míticos Hermosilla y Quintanilla. "Estábamos cada uno por su lado, pero nos juntamos y decidimos unir fuerzas. Dejé todo de lado por esta cuestión, así que por un rato no haré teleseries y volveré a trabajar en vivo", agregó Gonzalo.
