En un calefaccionado Movistar Arena, cerca de 6 mil almas esperaron impacientes el concierto de Américo. El intérprete de Traicionera llegó enfundado en un elegantísimo traje negro y con quince minutos de atraso.
Pero bastó sólo la bailable introducción, para que la gente prendiera y no parara de bailar y corear cada una de las canciones que presentó.
Con el hitazo El Embrujo, abrió los fuegos, siendo aclamado por la barra presente. De ahí en adelante se fue de temón en temón con lo que logró elevar las temperaturas al máximo.
SORPRESA
Para calentar motores, Américo, se lanzó con una selección de las canciones más populares de sus anteriores producciones.
Pero no todo fue recocido. Además de lanzarse con varias novedades, sorprendió a sus fans con sus invitados.
El primero en hacer acto de presencia fue Luchito Jara, con el que últimamente están súper amiguis. Con él compartió Dos corazones rotos por una mujer, temita que hizo tiritar los chitecos de las damas presentes.
El turno siguiente fue de Douglas. El cantante que está mejor que nunca, interpretó la nueva canción producida por el mismísimo Américo. Y es que el chiculeo se la tenía guardadita, pero ya está incursionando seriamente en otros ámbitos musicales y el primer paso es la producción musical del esposo de Ana Sol Romero.
Al cierre de esta edición una fanática casi se desmayaba cuando el cantante la subió al escenario para cantarle al oído.
COLOR DE HORMIGA
Pero también hubo saldos negativos del mambo. La alta demanda hizo colapsar en un principio, la entrada, el lugar y los estacionamientos, tema que logró solucionarse a tiempo.
El clima también le jugó una mala pasada al ídolo tropical y en más de una oportunidad dejó escapar unos gallitos o simplemente no llegó al tono en los altos.
