En una semana marcada por los fuertes dichos de Marlen Olivari en contra de Roberto Dueñas, Jessica Alonso, ex del "Peluche", es sin duda una de las personas que más conoce al aludido.
La bife, que llegó al país de la mano del productor, es conocida por su estilo directo al hueso, pero en esta pasada ha preferido mantenerse al margen de los cahuines y evita referirse a su ex.
Y es que por ahora lo único que le quita el sueño es su nueva faceta de animadora de tevé. Tal cual, ya que la monumental chiquilla se matriculó como uno de los rostros de la señal de cable Zona Latina, quien la reclutó como la nueva conductora del cocido Zona de Reggaeton.
"Tuve una reunión en el canal Zona Latina y me dijeron que ahora que soy rostro del programa, me limitara sólo a contestar preguntas de índole reggaetonero porque me están pagando y haciendo cambiar a un enfoque más profesional", soltó la rucia en la onda seria.
- Pero es difícil no preguntarte de tu ex, después de todo lo que ha pasado.
- Mirá, lo único que quiero ahora es dedicarme a algo profesional, eso es lo que me va a dar de comer.
- En tu momento fuiste bien deslenguada. Te tirabas en picada contra todos, ¿qué pasó en el camino?
- En realidad ahí no había ningún contrato de por medio. Uno va creciendo profesionalmente y me encanta lo que estoy haciendo ahora. No te digo que soy seca animando, pero voy aprendiendo. Alba Quezada (ex conductora), me ha ayudado mucho.
- ¿Definitivamente la idea es dejar atrás los escándalos?
- Sí, estoy dedicándome a la animación y a mi programa y estoy tratando de ganarme al público. Al principio yo apuntaba a eso (los escándalos), pero ahora no. Sólo quiero ganarme al público reggaetonero.
- ¿Qué es lo más peludo en la animación del programa?
- Aprenderme los nombres de los grupos. Es que uno no está familiarizado, sólo escuchas las canciones, pero ahora hay que presentarlos y tengo que pronunciarlos bien.
- ¿Qué onda con tu paso por la tevé?
- He tenido harta experiencia en el mundo del espectáculo, pero me encanta la tele. Trabajé en Morandé, en la revista del Che Copete y en Infieles, pero la animación es algo distinto y me encanta.