No es la primera vez que Justin Bieber deja tirada a su barra, pero la que se mandó en Oslo, Noruega, llegó al límite.
Es que comenzó un concierto con la canción “Boyfriend”, y de una se fue para la casa porque sintió mala onda en el ambiente.
No es la primera vez que Justin Bieber deja tirada a su barra, pero la que se mandó en Oslo, Noruega, llegó al límite.
Es que comenzó un concierto con la canción “Boyfriend”, y de una se fue para la casa porque sintió mala onda en el ambiente.