"Me ha costado sentirme en casa", confiesa Kel Calderón. "Mantener una casa funcionando es difícil", añade.
Es que la hija de Raquel Argandoña abandonó el nido hace unas semanas y hoy vive solita.
Una nueva experiencia que se suma a las múltiples actividades que realiza la joven abogada.
Claro, porque Kel todavía está haciendo su práctica, pitutea de lo lindo en "Maldita Moda" y nunca le faltan los proyectos publicitarios.
E igual se embarcó en eso de vivir solita por primera vez en su vida.
KEL DUEÑA DE CASA
Al respecto habló con Biut y contó cómo ha conseguido sobrevivir a su primera experiencia como "dueña de casa".
Y una de más significativas tiene que ver con las compras. Algo que claramente no hacía cuando vivía en la casa materna.
"Una dice, ya, fui al supermercado, pero resulta que a los dos o tres días ya te falta algo y tienes que ir de nuevo. Además, es todo súper caro", contó.
Otra tiene que ver con la alimentación. Y cómo no, si según confidenció "vivo a latas de atún y de palmitos. Es que es lo más fácil, porque yo no cocino nada".
EXTRAÑA A RAQUEL
Y cuando le preguntaron si por el tema de la comida echaba de menos a su mamá se fue en la honesta: "No, para nada. Eso no lo echo de menos, porque mi mamá es igual de nula para la cocina que yo".
Reconoció, eso sí, que "echo más de menos su compañía, las conversaciones".
"Yo la he echado más de menos que ella a mí. Imagínate que pasó una semana y la llamé llorando que la extrañaba y ella me dijo 'Kel, ten dignidad, te fuiste hace cinco días'", recordó.
Lo bueno es que cuando la visita Pangal, él le cocina. "Debería pedirle que me deje unos táper, jajá", la tiró.