A pesar de que confesó que no lo ha visto en los últimos días, Kel Calderón defendió con uñas y dientes a su pololo Pablo Schilling, quien recibió una tremenda paliza de parte de una manga de odiosos el viernes pasado.
Para los que no cachan, el musculín terminó con un costillar quebrado tras la tanda que le dio un lote de compadres a la salida de un boliche de comida rápida ubicado en la rotonda Atenas.
"Si es como yo sé, que hubo seis personas que se enfrentan a un hombre, son unas niñitas, unos cobardes, porque eso no se hace", fue una de las primeras perlas que la estudiante de Derecho se despachó en Fruto Prohibido.
Sobre la factibilidad de que el hombrón sea violento, la lola lo defendió: "Yo llevo un año y medio con Pablo y nunca lo he visto pelear. Él tiene muy claro que tiene muchísima fuerza, el día que él se agarre a combos no va ser por cualquier cosa. Pablo no es un hombre que ande a los combos".
Y sobre el mismo punto la hija de Raca reconoció: "Pablo es un hombre que tiene mucha fuerza, si es verdad que tiene una costilla rota tienen que haberle pegado con algo porque tiene muchísima fuerza".
Luego la chiquilla confirmó que a pesar de estar en una mala racha "él está siendo cuidado por su familia y pronto vuelve a trabajar".
ENOJO
En un verdadero polvorín se transformó ayer por la matina el Buenos Días a Todos, y todo por una inocentona broma lanzada por Ricarte a propo de la golpiza que recibió Pablo Schilling.
En el cocido mañanero estaban chachareando de lo más pulento sobre dicho episodio cuando Ricarte, con su particular humor, lanzó la tallita sobre los responsables del hecho, la cual hizo arder Troya: "Eran sicarios enviados por alguien...".
Después de unos segundos sin decir ni pío, la Raca se lanzó con todo y le echó la foca al chistosito.
"Qué pesadez su comentario, la verdad es bien incómodo estar aquí... Uno no elige los compañeros que tiene al lado", señaló la mamá de Kel, a lo que altirante el tatita de la opinología respondió que pensaba exactamente lo mismo.
Raquel contragolpeó al instante y aseguró que para ella "no es problema porque yo no vengo a hacer amistades aquí".
De ahí en adelante la cara de ajo de Raquel no se la sacó ni un circo de tonys y sólo después de un rato decidió volver a la conversación.
