¡Hola liiiños! Estoy muy contento. Ayer fui a reclamar mis gaviotas, después de 8 años de mi fracaso en la Quinta, ¿y saben qué? ¡Me las dieron! Le avisé al tiro a Rudy Rey pa’ que fuera por la suya, pero al llegar, sonó de nuevo: la de él se la habían dado a Ruminot la noche anterior.

¿Les cuento una cosa? Ando medio cachúo, más que el Palomo... ¡Es que han hecho el tremendo atao con Pedrito y sus chistes de religión y epilépticos! De hecho, los epilépticos católicos que estaban en la Quinta fueron los que más rápido aplaudieron (mientras se persignaban al mismo tiempo). Karadima llamó indignado para pedir que su gente, en vez de chiflar a Ruminot, lo fueran a chiflar a él a su casa.

Todo esto me hizo pensar que tal vez había un complot en su contra. Es más, pocos colegas han salido en su defensa y otros ex compañeros suyos en “El Club de la Tragedia”, como Pato Picante, le han dado en el suelo. De los pocos que apañaron al negro cuma, sólo Oscarito le dio una mano (una cagá de mano, pero peor es nada).

Algo está claro: Ruminoche no se regaló la gaviota, como Lucho Jara. Me parece injusto que pidan que la devuelva, si se la dieron los animadores. ¡Por último que el Rafa la pague!

Decidí investigar al respecto y descubrí lo siguiente: algunos dicen que fue víctima de vudú. De hecho, en la pieza del hotel de Natalia Valdebenito encontraron un carbón lleno de agujas que confirma esa teoría. Curiosamente, no sería el único caso: se encontró un vudú de Javiera Mena con agujas en la garganta, otro de Queraltony en un clóset amordazado y hasta uno de la Rolón: estaba toda clavada. En la pieza de Lucho Jara también pillaron un muñeco, pero era una barbie.

Ayer se le entregó la corona de Reina de Viña. El director de La Cuarta, don Sergio Maracolí, se la puso a Luli, que no podía más de felicidad. Hasta la Bolocco la felicitó, quién además de tirarle flores a la Nicole Moreno estrenó pololo nuevo, un mozalbete de 61 años. Se nota que Cecilia es vejeteriana: ¡come puros vejetes! Pero pese a eso, aún conserva esa chispa y elasticidad, ¡si hasta se dio el lujo en “La Movida” de recordar el mítico Boloccazo, y de paso al querido Sergio Livingstone, mientras el Guatón Salinas se tiraba un peo de tanto comer el yogur que dejó la Diana después de salir del camarín del Poto Ramírez.

Y llegó la nepenúltima noche del Festival. Esta vez, lo vi desde mi casa, así podía cambiar el canal cuando aparecía el Rafa. Abrió la noche Alborán, que hizo dúo con la Botota Fox y lo hicieron bien. Se nota que Alejandro Panz se gastó su viático en comer en vez de conseguirse a una buena partner. Luego salieron los Locos del Humor, que estaban tan añejos, que los vi con un doblón y una free, pero el pueblo los quiso igual y se rió con ellos.