Mey Santamaría volvió a mover el body como solo ella sabe. Junto a un lote de bailarines, hoy la morenaza está dedicada a hacer fiestocas cubanas, con tal sabrosura, que hasta una doble de Celia Cruz se gasta en sus show.
La morena, de 39 peras, la misma que llegó en 2003 a menéarselas todas en Morandé con Compañía, aún conserva su ritmo caribeño y cuenta que se encuentra pasando uno de sus mejores momentos en la life, pues además de darle el palo al minino con sus fiestas cubanas (para eventos privados y empresas), su maternidad la tiene chocha de pies a cabeza, y además se siente más cómoda que nunca comadreando en el "Así Somos", de La Red.
Como puede ir cachando, la Mey se divide por tres: la tele, el bailongo y su único hijo, Nicolás, que mañana cumple 9 meses. "A veces creo que el tiempo no me va a alcanzar", larga la ex musa del Kike. Pero está más que bien organizada y sabe muy bien hacer cundir su día.
"Uno se hace el tiempo para todo, a veces estás cansada, pero hay que hacer las cosas igual. Cuando llego del canal a la casa tomo al tiro al Nico, no hay descanso, pero él es un rico y se porta tan bien que no me creerías".
- ¿Te acompaña a tus pegas también?
- No, la verdad es que cuando no estoy en la casa lo cuida el papá, que se porta un siete, o mi mamá, y si por casualidad nadie puede, se queda con alguna amiga mía, es que de verdad se porta muy bien.
- Oiga y usted está cada día mejor, una escultura por donde se le mire.
- Bueno, hago mucho ejercicio, como bien y tuve ayuda de la clínica San Pascual y mis secretitos por ahí.
- ¿El baile será uno?
- Empecé a hacer eventos hace muchos años, animándolos, en la época de “Morandé con Compañía” y me di cuenta que a la gente le gustaba mucho el baile. Así que primero invité bailarines, después unas mulatas y ahora ya tenemos un gran grupo con los que armamos un tremenda fiesta cubana. Es que llevo el ritmo en la sangre.