Habitualmente el cambio de look en una mujer es para mejor, pero el que se hizo Fernanda Hansen al final le ha ocasionado más dolores de cabeza que alegrías.
Fue cosa que apareciera como "cabello" de una marca de tinturas mencionara la palabra "cambio" ligada a "vida" y que había superado momentos difíciles para que los blablá le dejaran las orejas rojas y los tímpanos reventados.
Se cahuineó que se estaba aprovechando del momento y hasta apareció el supuesto verdadero amor de Felipe Camiroaga, quitándole todo el piso a la ahora "Morticia" Hansen, quien incluso se sacó la mugre en el aeropuerto mientras la prensa le hacía preguntas.
Y qué decir ahora, que hay un aviso mostrando su cambio de imagen con un discurso en el que cualquiera puede encontrar doble lectura: "Estoy en una parte mucho más reflexiva de mi vida, con proyectos nuevos, con ganas de explorar en cosas distintas, estoy mucho más apasionada", palabras que fueron la pólvora para los oídos de muchos.