"Las Tortugas Ninja 2" lo harán gritar ¡¡Cowabunga!!

Quería partir este comentario diciendo que “Las Tortugas  Ninja 2” son las Kramer versus Kramer de las cintas de tortugas. Pero claro, es un pelín exagerado ya que en esta peli no hay ningún matri de tortugas en pleno divorcio. De antemano, disculpe mi arranque de entusiasmo es que creo que cualquier película que en sus primeros minutos nos ponga a Megan Fox con chasca rucia o vestida de colegial a lo Britney Spears, merece la pena o por lo menos una oportunidad. Y esa es la que le tiene que dar a “Las Tortugas Ninja 2: Fuera de las Sombras”, la secuela de la primera patita lanzada el 2014, y siendo bien sincero, esta supera con creces a su predecesora.

Leonardo, Donatello, Miguel Ángel y Rafael, las únicas tortugas ninja que aman los estudiantes y encapuchados, vuelven en una pomada donde tiraron toda la carne a la parrilla para asegurar butacas en los cines. Chiquitines y  güailones que crecieron viendo a los verdosos en Canal 13, no podrán resistirse a la nostalgia y se les apretará el corazón al cachar que en esta secuela decidieron enchufar a los villanos clásicos como Rocoso, Bebop y Krang y el Doc Baxter Stockman. Además de sumar a Cassey Jones (Stephen Amell) el poli/patinador que se une como aliado al cuarteto de caparazones para hacer justicia y ver si es que la reportera Abril O’Neal le da su guasap.

¿Qué mal puede salir de todo eso? Súmele canciones onderas, ene chistes, más acción para darle enjundia a la aventura en que los discípulos de Splinter deben luchar para salvar el mundo, evitar que se abra un portal que traerá caos y la destrucción de la humanidad. O sea, un día común y corriente. Además, la Fox nos presenta una de sus mejores actuaciones ya que la cabra es una actriz superdotada cuando se trata de irse en uno a uno actoral contra un Transformer o tortugas, ninjas y mutantes.

Película ideal para los nostálgicos, ñoños, geeks o jóvenes emprendedores que aún viven con los papis. También para animalistas y todos los que quieren luchar contra el prejuicio de que las tortugas son lentejas.

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