Ya no es un misterio que Leo Rey es un chicha fresca, y así quedó claro en su segunda participación en la serie Infieles de Chilevisión, donde promete dejar a todo el mundo como tetera de campo.
El crespo protagonizó junto a la ricarda Carolina Oliva el capítulo Prohibido Fumar, una historia donde el cumbianchero se interpreta a sí mismo y llega a pedirle ayuda a unas peluqueras porque su Camaro queda en pana.
Caro, quien interpreta a Cony, es una fan del artista y queda loquita cuando el ídolo llega a la peluquería para agradecerles su ayuda y de paso pide que lo bronceen para una gira en Bolivia.
Cony es la patas negras de Germán, el dueño de la peluquería, y se las arregla pa' dejar como un africano al cantante.
Producto de su tostado, Leo Rey tiene que volver al centro de estética pa' pedir que le bajen el color porque tiene un lote de shows.
Así es como Cony se lleva al cantante a su casa donde le hace un tratamiento personalizado en la tina y terminan después a los calugazos.
Lo peor es que Germán está cachudo y va a la casa pa' pillar a su amante en malos pasos. Finalmente, Leo termina poniendo los ojitos blancos con Cony en la onda paraguaya en la caja escala del edificio. Por suerte, el cantante se salva de que Germán lo pille gracias a sus fans del edificio, que hacen pasar piola al ruliento.
A raíz del episodio el diario pop ubicó a Leo Rey, quien se prepara para su próximo show en el estadio Bicentenario de La Florida.
- ¿Cómo fue verle el ojo a la papa con Caro Oliva en Infieles?
- Cuando terminé de grabar le mandé flores a cada una de las actrices y les di las gracias a todo el equipo. Pero me costó bastante la escena de los besos. Carolina se portó un siete y medio. Creo que fue un buen logro y cumplí el sueño de muchos.
- ¿Qué opinas de Caro?
- Es una hermosa mujer, simpática e inteligente.
- Ella te pidió cuando estaban azotándose que le cantaras...
- Ahí traté de ponerle harto de mí al personaje, porque soy bueno pa' la talla. A mí se me ocurrió tratar de cantarle mientras hacíamos el amor.
- ¿Cómo fue la grabación?
- Nos demoramos tres días y puse mi auto. Lo pasamos muy bien y conocí un equipo humano tremendo.
- ¿Tu señora no te reta por frescolín?
- No, está todo conversado. Está todo bien.