Fiel a su estilo, la actriz Lindsay Lohan partió con un condoro el primer día de trabajos comunitarios en una morgue que le impuso una corte de Los Angeles, y todo por el robo a una joyería que cometió hace un par de meses.
Lohan llegó atrasada a su primer día de trabajo, según ella debido a que se perdió.
Su vocero, Steve Honig, dice que la tardanza se debió en parte a que Lohan no sabía por cuál entrada debía ingresar a la morgue.
Sobre su nuevo pastel, el vocero Craig Harvey, dijo que la actriz de 25 años llegó con 40 minutos de retraso a una sesión de orientación programada para las 08:00 horas del jueves, pero que se le dará otra oportunidad de llegar a tiempo el viernes (hoy).
Lohan intentó reportarse en la morgue al día siguiente de haber sido reprendida por una jueza por haber sido expulsada del servicio comunitario que prestaba en un albergue para mujeres.
La audiencia terminó con la revocación de su libertad condicional y su salida de la corte esposada. Luego pagó una fianza de 100.000 dólares y quedó en libertad.
