A lo largo de los años han quedado en la historia descabelladas chivas como el "Rey León" de la Coté López o la abducción del marido de la Paty Maldonado, y ahora sumamos otra pa' la risa. Resulta que Lindsay Lohan, quien cumplía arresto domiciliario por haber dado positivo en un alcotest, asegura que el tufómetro la sapeó por culpa de té fermentado que se había tomado y que tenía un mínimo grado alcohólico. La compañía que lo fabrica reconoce que contiene alcohol, pero en una cantidad imperceptible.