Luciana Echeverría dejó anoche tiritones a todos los que siguen “La Poseída”. El exorcismo de Carmen Marín tuvo lo suyo. Si hasta sangre por la boca arrojó la tierna chicuela.
Las escenas fueron de thriller: Carmen vestida de blanco y amarrada en la cama. Mientras Sor Juana y el Padre Raimundo practicaban el rito para sacarle el demonio, la dulce criatura empezó a convulsionar, a insultar a la monjita y a tirarle firme los corridos al curita. Gritos, chillidos, insultos y contorsiones, hasta que logró liberarse de las amarras.
En ese instante atacó y mordió el cuello del sacerdote e intentó salir del convento. Afuera, el pueblo la esperaba para lincharla, porque pensaban que matándola moría el coludo. Tratando de defenderla estaban Rosa y Gabriel.
Al ver a Gabriel, inexplicablemente Carmen intenta atacarlo con un cuchillo. Raimundo logra detenerla, pero al tomarla comienza a botar sangre por la boca.
-¿Quedaste muy cansada después de las grabaciones del capítulo?
- Es que una, como en cualquier trabajo, agarra un ritmo que se vuelve cotidiano. Es cierto que es intenso, tienes que estar preparada, concentrada, pero sí, es cansador.
- ¿Y no te daban cuco las escenas?
- Cuando grabamos está todo muy cuidado, en un ambiente muy protegido y de respeto...
- La historia se está poniendo cada vez más brígida...
- Desde ayer que se van a a empezar a saber muchos secretos. La intensidad de la historia sube, se empieza a desarrollar de manera muy fuerte, cada vez más...
- Te vimos botar sangre por la boca...
- Y vienen cosas peores...
- ¿Cómo lo haces para sacarte el diablo del cuerpo, antes de irte a tu casa?
- Jajajá, como cualquier otro trabajo, con mucha concentración. Uno trata de no llevarse el trabajo para la casa, pero, como te decía antes, las escenas han sido muy exigentes...
- ¿Muy terrible?
- No sé si tan terrible, pero son muy exigentes. Es un trabajo muy intenso, pero me he preparado harto y todo está muy bien pensado, muy controlado.
- Cachamos de antes que los capos de la pomada grababan los exorcismos de a poco, para no sobre exigirte...
- Han respetado muy bien eso, pero la misma historia se va poniendo más intensa, por lo que las grabaciones de los exorcismos son más seguidos también.
- ¿Puedes meter de tu cosecha en las posesiones?
- Yo hago las coreografías, por decirlo de alguna forma, jajajá. Las contorsiones, las convulsiones, eso es parte de mi creación del personaje.
- Oiga, ¿y usted está más poseída o se va para el lado de una enfermedad siquiátrica?
- Mmmm... la verdad no te puedo responder eso.