Con sólo un par de semanas siendo titular en el equipo de Intrusos, de La Red, la actriz María Luisa Mayol cree que es chiva cuando uno le cuenta de su arrastre entre la barra masculina.
La flaquita que posee lo suyo, tiene 30 años y también pitutea como actriz en el culebrón Esperanza, de TVN. No obstante, es en el cocido farandulero donde la chiquilla se luce con su personaje de Malú, pega en la que hace y deshace en el panel de Intrusos.
"Es una cuica, loca, linda", comenta María Luisa, que para pena de muchos no está solterita, ya que desde hace rato que es la media naranja de Boris Quercia, el dire de Los 80.
"A mí me gusta mucho la ropa. He hecho hartas asesorías, asisto a los eventos top, pero Malú es mucho más socialité que María Luisa, yo en el fondo soy potona parrillera", dispara la ricura que la semana pasada con su rol empapeló al pelotero Claudio Valdivia por considerarlo un tipo "patológicamente infiel" y le dio un beso con lengua a José Miguel Villouta.
- A ver, del jet set actoral, ¿quiénes son tus yuntas?
- Tengo muchos, mi gran amiga amiga es la Paz Bascuñán, la Marcela del Valle, Amparo Noguera, la Pancha Gavilán (la Violeta Parra del cine), Tamara Acosta. De los hombres, Marcelo Alonso, Benjamín Vicuña, hay varios.
- ¿Y ninguno te tiró las orejas por volverte "intrusa"?
- Lo tomaron súper bien. Si uno es amigo por lo que es la persona. Y quizás el que se haga prejuicio porque estoy en la farándula, no era tan amigo mío.
- Pero a veces te tocará hablar de un camarada...
- Es que yo no estoy para ser opinóloga, entonces no hablaré de mis amigos. Soy objetiva nada más, como lo es uno en cualquier lugar, trato de ser como la dueña de casa.
Siendo sincero, le cuento que la cabra tiene harta gracia y está bien armadita. Con 90 de parachoques, 62 de cintura y 88 de caderas, cree que es chamullo cuando uno le cuenta lo apetitosa que la encuentran los hombres.
- Mija, ¿me va a decir que aplanando calles no le llueven los halagos?
- No me piropean nada, me encantaría que lo hicieran. A qué mujer no le gusta, si una anda haciendo dieta y ejercicios. Ni Boris me piropea.
- Pero, a ver, ¿te consideras rica?
- No, no me encuentro rica. Lucila Vit puede serlo. Lo que sí, me encuentro interesante; yo voy por el look distinto, soy pretenciosa. Si engordo me preocupa, me gusta verme bien.
-¿Podríamos verte en bikini el verano?, onda peleando el cetro de Viña...
- Tendría cero posibilidad, imagínate Malú contra las tremendas mujeres voluptuosas. Mi eslogan tendría que ser De lo poco güeno, o algo así.
Durante la semana María Luisa es estricta como samurái en cuanto al manye. Aunque los fines de semana se desbanda.
- ¿Tu plato favorito?
- Los ñoquis que hace Boris me encantan. También me gustan mucho los dulces, tengo una debilidad por el manjar. Y nada de trocitos, me puedo comer una torta entera un fin de semana.
- ¿Y para apagar la sed?
- Soy buena para la champaña y el vino, lo fuerte no porque para qué andar dando jugo.