Fe. Esa es la palabra que define el sentimiento actual que mantiene en pie a Lilian Clark. La madre de Gustavo Cerati a tres años del Accidente Cerebro Vascular (ACV) que sufrió su hijo en Venezuela (2010), decidió hablar por primera vez con un medio chileno.
"Todo gira alrededor de Gustavo, es lo que nos toca y hay que ayudarlo", dijo y repitió varias veces durante la conversación emitida anoche por "Más Vale Tarde", de Mega.
Visiblemente emocionada, la mujer contó que su hijo se ha mantenido "estable después de tres años. Está muy bien, no tiene complicaciones de otro tipo y eso me da mucha fe".
Reconoció, además, que ha aguantado muy bien este cuático proceso confiada en la fuerza del cantante. De hecho, recordó que hace un año "sus pulmones se llenaron de sangre, lo que para los médicos en aquel momento era casi fatal", sin embargo, después de horas de incertidumbre de un minuto a otro sintió un alivio "y los médicos me confirmaron que se había recuperado".
LA PELI CLARA
Sobre la opción de desconectar en algún momento a su hijo, fue clara: "No haría algo contra la voluntad de Dios, mucho menos con mi hijo, jamás, salvo que lo vea sufrir, pero él está plácido (...) Por ahora mi expectativa es que abra los ojos".
Clark reconoció que los costos de mantener a su hijo todo este tiempo en la clínica los cubre una obra social y que cuando eso se acabe "lo que él ha atesorado será para su salud, usará sus reservas".
Sobre el nulo contacto que ha tenido con los ex Soda, Charly Alberti y Zeta Bosio, aclaró: "Siempre decimos que los hombres son más miedosos que la mujer. Yo creo que Charly es un buen tipo. Cuando pasó lo de Caracas él quería venir, pero mejor que no porque o si no íbamos a tener que cuidar a otro enfermo. Con Zeta no tengo tanto conocimiento, personalmente no lo he visto".
