En los últimos meses, Roxana Muñoz no sólo ha tenido que cargar con los mil y un dramas con su amorcito, el Kike Acuña.
Desde principio de diciembre, la chiquilla perdió toda comunicación con Patricia Aburto, su santa madre. Están alejadas al punto que la iñora contó a La Cuarta que desde entonces sabe de la retoña sólo a través de la prensa farandulera.
Así se enteró de sus atados amorosos con el Kike, al que la ex conejita tuvo que sacar como lapa de un carrete y con quien decidió no casarse a tres días de la pisada de palitroque.
"De Roxana no sé nada, no tengo contacto hace mucho tiempo, de una semana antes de la Navidad. En el kiosco de la esquina vi lo que ha pasado con ella, nomás".
- ¿Qué pasó con Roxi, doña Paty? ¿Por qué no se hablan?
- Hay cosas que sucedieron, cosas personales, que no puedo comentar...
- ¿Tiene algo que ver con su yerno, el dolape Acuña?
- No, no. Kike para mí es un caballero, una buena persona, muy de corazón. No tengo nada malo que decir de él. Han pasado otras cosas, pero no quiero referirme a eso. Tengo una hija chiquitita que cuidar.
- ¿Usted qué opina del casorio que no fue?
- No sé, las personas se enamoran y deciden casarse. Si lo hicieron, bueno, estará bien, pero como le digo, yo no tengo ni un contacto con ella, así que más no puedo opinar. Las parejas son así, ellos sabrán.
- ¿Disculpe, pero la había invitado a la ceremonia?
- Mmm, mire, no quiero hacer comentario de eso.
Luky Buzzio, más conocido como "Pichulotote", entró a las lides empresariales y es el nuevo socio de la disco Costa Brava de Chillán.
"Me ofrecieron esta oportunidad, con mi abogado vimos los números y eso manda, así que acepté de inmediato. Además, allá la gente siempre me recibe excelente", soltó el musculín al diario pop, explicando por qué decidió hacerse socio de dicho cuchitril en el sur del terruño.
- ¿Vas a tener un copete que se llame "Pichulotote"?
- Jajajá, no sabemos todavía, pero seguro que sí… Algo afrodisíaco con algunos polvos mágicos. Le vamos a pedir ayuda a un barman que sea bueno y pueda crear un gran trago.
- ¿Y el local es grande o chico?
- Es gigante. Eso me da la oportunidad de llevar artistas. Yo iré una o dos veces al mes con mi show de humor.
- O sea que a "Pichulotote" le importa el tamaño…
- Exacto, jajajá.
- ¿Cómo vas a elegir a los guardias? ¿No estará la vara muy alta?
- No, para nada, yo soy uno más… conozco de esto porque fui guardaespaldas de Valeria Mazza. La idea es que no haya agresiones, porque siempre hay un pelusa que molesta, pero el primero que toque a alguien se va para la casa.