Marc y Jennifer ya piensan en Viña

San Valentín hizo de las suyas el sábado pasado y  tuvo tan buena puntería que una de sus flechitas de amor le llegó a Marc Anthony y Jennifer López, una de las parejitas más esperadas de Viña 2009.

Resulta que hace un buen rato las malas lenguas andaban diciendo que los tortolitos se querían divorciar, ya que en diciembre del año pasado la boricua ofreció un recital en Los Ángeles  súper producida, llena de joyas y brillo, pero sin su anillo de casada.

En un principio el matrimonio de cuatro años de vida y del cual nacieron los gemelos Emme y Max, que el 21 de febrero apagarán las velitas por primera vez, no pescó mucho los rumores de la gallada. Sin embargo, al cachar que la cosa pasaba de gris a negro, la dupla decidió aclarar la cuestión y no encontró nada mejor que hacerlo en un concierto que el galancete se mandó durante el "Día de los enamorados" en el Madison Square Garden de Nueva York.

Fue así, como en medio de una pila de almas y luego de interpretar tres de sus famosos temas y hacer gritar a la barra como condenada, Marc pidió un minuto al respetable, paró el show, tomó aire  y dijo: " Quiero decirles algo, ha habido rumores, pero  tuve mi celebración de San Valentín y con Jennifer estamos súper bien". Después de eso y una vez que el cantante  se quedó callado, la respuesta del público fue inmediata y comenzaron a sentirse aplausos de apoyo y el ambiente se llenó de emoción y amor.

De hecho, fue tanta la onda romanticona del lugar que como broche de oro y pa' matar cualquier duda, el salsero agregó: "Quiero presentar la nueva luz en mi vida", llamando al escenario a su amada esposa, quien apareció con un espectacular y generoso vestido negro y con uno de sus hijos en los brazos, mientras que el otro pequeño era cargado por el orgulloso y enamorado artista.

FESTIVAL

El recital del pasado 14 de febrero, además de despejar las dudas de un posible quiebre de la topísima pareja,  fue un adelanto de la mega presentación que promete mandarse el salsero el 28 de este mes, en la noche de cierre del Festival de Viña. Las espectativas  de su show en Chile son tantas, que incluso se dice que podría canturrear en compañía de su esposa, quien lo acompañará por estos litros, y dejar más contento que perro con pulgas al Monstruo de la Quinta. En todo caso, el minazo también hará de las suyas el 2 y 3 de marzo en la capital.

Ma. José Marilao M.

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