La buena, la fresca, la lisiada, el rico y el pobre. Con estos mismitos ingredientes bananeros partió ayer como avión la segunda teleserie con que TVN le pone el pecho al horario de media tarde: Dama y Obrero.
Los números del odioso rating la dieron por ganadora con 17,7 andamios, cosa que su elenco ya lo olía antes del debut. “Hay varios clichés del melodrama que siempre ha seguido la gente, como la lisiada (Elisa Zulueta), y está especialmente hecha para el público heterogéneo”, dice la protagonista María Gracia Omegna, la pituca “Ignacia Villavicencio”, quien le pone los cuernos al novio con “Julio” (Pancho Pérez-Bannen), un engominado maestro de la constru.
La carita de loza cuenta que el personaje de buenita, pero infiel, se le ha hecho de lo más entrete, sobre todo “porque es jugar a ser una cuica entrampada con un obrero que le prende todas las pasiones, que ella jamás pensó que iba a tener”.
CON POLVO
Las grabaciones del culebrón se están realizando en distintas partes y malls llenos de polvo y a medio hacer en Chago City.
María Gracia suelta que con sus compipas de la teleserie se lo llevan p’ allá y p’acá: “Sucede que no tenemos un galpón fijo, estamos en Recoleta, Conchalí, Huechuraba. Además, al lado de una de nuestras locaciones hay una construcción de verdad, ah...”
- ¿Los car’e picota te han tirado piropitos?
- Claro y son entretenidos, me encanta el obrero y que me tiren piropos.
- ¿Qué cuestiones cochinas te gritan?
- Me han dicho los clichés máximos, como la del ‘bombón que no se derrita al sol’, que ‘me gustaría ser jabón para recorrer tu cuerpo’, jajajá, cosas así.
- ¿Y son fibrosos igual que Pancho Pérez- Bannen?
- No me he podido fijar mucho. Cuando una pasa por el lado de la construcción lo hace con la cabeza gacha, porque sabe que viene algo, que le tiran piropos a lo que se mueva. Una siempre está piolita tratando de no mirar a la cara para no hacerlo tan directo, trata de pasar lueguito.
- Entre nos, tú cachái que el casco y la perforadora vuelve locas a las más golosas...
- No le había tomado tanto peso al obrero hasta que vi a Pancho Pérez-Bannen con su sudadera sacando cemento, mmm...
