La protagonista de Transformers, Megan Fox, ya no elige sus películas por el guión, sino que ahora lo hace con corazoncito de mami y decide si estar o no en una producción, sólo por el tiempo y el dinero que le ofrecen los capos de las pelis.
La estadounidense es madre de dos niños, Noah y el pequeño Bodhi, quien llegó al mundo este año. Por ellos asegura la belleza del cine que debió cambiar sus intereses y que aunque nunca fue ambiciosa, ahora el dinero le importa muchísimo más.
“Es tan difícil ser una madre trabajadora, sobre todo cuando tu corazón no está en tu trabajo, cuando tu corazón está con tu familia”, contó la chiquilla.
"Tengo que hacer una película al año, porque tengo que invertir en su futuro y ser capaz de pagar sus estudios superiores y proveer todo para ellos", agregó.
Además confesó que su idea es sólo grabar en Los Ángeles. "Todo es cuestión de tratar de pasar el menor tiempo posible lejos de mis hijos".