LOS ANGELES.- Si hay algo distintivo y que todos los papita de cazuela admiran de la pechocha Sofía Vergara, es su delantera bien latina, de esas que aseguran cabros chicos gorditos y con los cachetes rojos. Pero los atributos de la protagonista de la serie "Modern Family" casi pasan al olvido.
Resulta que el ex publicista de la chiquilla, un tontón que ni siquiera merece ser identificado, le pidió a la actriz que fuera al quirófano para realizarse un procedimiento de reducción mamaria, ya que, según él, con la operación podría conseguir más trabajo en producciones televisivas y cinematográficas en Gringolandia.
Por suerte, no le hizo caso. "Cuando me mudé a los Estado Unidos, yo era más voluptuosa y me sentí un poco diferente", dijo la actriz, de 39 años, a la revista American's Health. Pero la colombiana se rehusó a operarse y hoy agradece no haber escuchado esos consejos. "A mi madre casi le dio un ataque al corazón cuando se enteró. No me atrevería a cambiar la figura que me dio Dios", sostuvo.