De poco sirvieron las malas críticas o la censura al lolerío. Hasta ahora la ópera prima y bien chocolatera cinta de Pablo Illanes, Baby Shower, se alza como la peli criolla más exitosa de los últimos años, con más de 30 mil espectadores que han sufrido hasta el retuétano con la crudeza del filme.
Pese a que sólo lleva una semana en cartelera, las anécdotas sobran. Que algunos se arrancan en la mitad de la función, que desde otras salas se pueden escuchar los gritos y alaridos a todo guataje , incluso que asistentes invocaron a Guajardo en plena sala.
El diario pop asistió a una de las funciones de la peli en el Cinemark de Plaza Vespucio y, según nos informaron en RRPP de la cadena, con sólo 20 copias ya han cortado 35.833 boletitos.
En terreno, les podemos contar que la barra pasa harto susto, comenta el exceso de sangre y que las más pudorosas se tapaban los ojales durante la escena en que, de un puro mordisco, Claudia Burr le mutila el miembro viril a un mozalbete.
"Me ha sorprendido el exito porque es una película de terror. No es una comedia ni habla de la historia reciente de Chile. Es una cinta de terror donde el interés es provocar al espectador", comentó a La Cuarta el director Pablo Illanes.
- Dicen que hay gente que arranca e incluso que han vomitado... ¿lo sabías?
- Mira, lo del vómito me llegó. Y lo de la gente que se va de las salas creo que es porque no hay un acostumbramiento a las películas de terror, no está el hábito. En este caso, nosotros nos preocupamos de poner en el afiche el terror está por nacer, por lo que el público debió saber a lo que iba.
- ¿Quiénes son específicamente los que viran de la pomada?
- Sé de mujeres embarazadas y parejas muy jóvenes, que están recién pololeando o algo así. No son muchos, son más o menos 4 o 5 por función, remató.
Por otro litro, Francisco Schlotterbeck, gerente general de Cine Hoyts, reveló que desde la peli del Rumpy, Grado 3, que la gallá no asistía con tanto entusiasmo a un estreno nacional.