El periodista vive su mejor momento en la pantalla de Canal 13 al ser uno de los favoritos de la audiencia en "MasterChef Celebrity" y "Bailando por un sueño". Avisó que "todos los ritmos los tomo fácil, en especial, en un carrete a las tres de la mañana".
"¿Irse a dormir temprano? No, porque hoy sale Nacho Pop a la pista". Esa es la excusa predilecta de los bohemios para quedarse pegado a la pantalla enana y seguir todos los entretelones del "Bailando por un sueño", de Canal 13.
Álvaro Reyes se convirtió en el fetiche de la audiencia no sólo por su participación en el estelar de baile, sino también por estar entre los rostros más top de MasterChef Celebrity.
"Todas las experiencias nuevas me motivan. O sea, imagínate compartir escenario con gente tan importante como Martín Cárcamo, a quien le dije cuando chico que fuera animador. Como decimos los bailarines, esto ha sido un ballonné pas, o sea un salto en mi carrera", sostuvo Nacho.
Su paso por el programa le ha servido para conocer un nuevo mundo e identificarse con varios iconos. "Me siento más cerca a 'Guru Guru' que es uno de los mejores bailarines que he visto y que mezcla esa técnica que tenemos los profesionales con el humor", dijo.
-¿Qué ritmo te sale del alma?
En general todos los ritmos los tomo fácil, en especial, en un carrete a las tres de la mañana, pero en el programa todos son muy complicados. El que se me podría dar sería la cueca, ya que en mi calidad de Rey Guachaca bailé en la Estación Mapocho con Naná y nos lucimos.
-¿Quién es el más tronco del programa?
No me gusta hablar de mis compañeros, pero he visto que Felipe Vidal me ha copiado varios pasos... el primero fue estudiar periodismo y ahora el baile. Lo importante es ponerle empeño. Es el secreto que tenemos con mi amigo.
-Más allá de las bromas, ¿te afectan las críticas del por qué sigues invicto en los programas?
¿Qué bromas? No sé a qué te refieres, yo me tomo las cosas muy en serio. Estar en MasterChef ha sido un cambio en mi vida, pues aprendí a cocinar, y en Bailando por un sueño he aprendido a bailar. Ojalá que hagan un programa para hacerse millonario... Pero las cosas hay que tomárselas con humor siempre...
-En "Bailando", Martín recordó tus descargos porque te habías quedado sin pega. ¿Te arrepientes?
Pero en lo más absoluto. Uno puede cometer errores y tener aciertos, pero al final del día ambos te sirven para aprender y seguir creciendo en el trabajo y en la vida.
- ¿En un momento te asustó la cesantía?
¿A quién no?
-¿Sentiste que te echaban de menos en la TV?
En lo absoluto y quizás se pueden sorprender, pero hay vida más allá de la televisión. No es el único trabajo donde se puede desempeñar un periodista. Por otro lado me di cuenta que el cariño de la gente sigue ahí y es por eso que en esta pandemia decidí poner mis redes sociales (@alvaromreyes) a disposición de las pymes.
-Al inicio de MasterChef eras de los más débiles y ahora estás en la recta final.
Es como la historia de mi vida: partí de abajo y aprendí. Sé que no voy a ser el mejor chef del mundo, pero mientras me pueda hacer un rico almuerzo, voy a ser feliz. He comido mucho en mi vida y en eso soy profesional.