Naomi Campbell, reconocida por su habilidad para meterse en una rosca tras otra, tendrá que tirar las manos por 200 horas en trabajos comunitarios.
La maniquí, de 38 años, admitió hasta seis cargos de desorden público en un juicio celebrado en el tribunal de Uxbridge (oeste de Londres), al que acudió vestida con un traje oscuro y escoltada por guardaespaldas. Y la sacó barata, ya que en el peor de los casos se podría haber adjudicado un máximo de seis meses de cárcel por cada imputación en su contra.
El magistrado también ordenó el pago de una indemnización de 190 euros a los dos policías contra los que descargó su ira. Asimismo, Campbell deberá compensar con 150 libras al capitán del avión, Miles Sutherland, y pagar una multa de 2.300 libras
El numerito de la Campbell ocurrió el pasado 3 de abril, cuando tuvieron que sacar raspando a la maniquí de un avión de la compañía British Airways. Y todo porque la chicuela armó la grande al cachar que una de sus maletas estaba extraviada.
