Podría pensarse que todo actor o toda actriz que ha participado de la saga de Star Wars esá feliz por ello. No por nada su creador, George Lucas, es un ícono multimillonario del cine gracias a esas películas.
Pero Natalie Portman, la estadounidense que estuvo en los episodios I (1999), II (2002) y III (2005) en el papel de Padme reniega de su paso por las cintas sobre los rebeldes y el lado oscuro de la fuerza.
"Star Wars salió al mismo tiempo que La Gaviota y todo el mundo pensaba que yo era una pésima actriz. Estuve en la película más taquillera de la década y ningún director quería trabajar conmigo. La saga casi arruinó mi carrera", sapeó la bella artista en una cháchara con la revista New York Magazine.
Natalie Portman, de 33 años, recordó que en esos tiempos lo pasó mal y que el fallecido director Mike Nichols -con quien trabajó en la obra teatral La Gaviota de Chekhov de 2001- la ayudó al recomedarla para varias cintas, entre las que estuvo El Cisne Negro, rol por el que ganó el Premio Oscar en 2011.
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