Si se lo soplaran en la calle no lo creería. Es que sería más fácil que el petiso de Edmundo no de más néctar en Chilito, que el actor gringo olvide la jarana y la guarde para siempre en el baúl de los recuerdos.
Pero como los milagros existen, hoy nos desayunamos con la noticia de que Charlie Sheen ya no está ni ahí con el maldito alcohol y las sucias drogas, y que ingresó a un centro de rehabilitación para combatir esos males. !saaaa onda!
El protagonista de la serie Two And a Half Men, tomó la decisión de 'hacerse ver' tras un monumental carrete de 36 horas que se pegó el último jueves, en el que terminó tan arriba del balón que tuvo que ser trasladado en ambulancia hasta el hospital Cedas Sinaí, en Beverly Hills, según soltó el sitio TMZ.
Lo más sorprendente de todo, es que al protagonista de la serie Two And a Half Men no hubo ni que rogarle, pues solito se dio cuenta que tanto 'punchi punchi' le estaba pasando la cuenta.
"Él ingresó voluntariamente a un centro de rehabilitación hoy. Está, más que todo, agradecido hacia todos aquellos que expresaron su preocupación", verseó su portavoz, Stan Rosenfield.
Ahora sólo queda esperar para ver cómo le va en su intento por sentar mollera. Nunca es tarde, dicen...