Una infección viral habría motivado el ingreso de Paul McCarney a un hospital de Japón, quien además de suspender los conciertos que tenía programado en este país, canceló también el primero de los recitales que ofrecería en Seúl.
McCartney "canceló su concierto previsto en Seúl, ya que los médicos le ordenaron permanecer completamente en reposo", dice el comunicado que entregó la empresa que organizó el evento musical.
De hecho, el ex beatle, de 71 años, pidió perdón a sus seguidores por la suspensión y dijo que se siente "decepcionado" por no poder actuar para ellos.