Salieron altiro metiendo bulla Claudio Castillo y Fernando Rojas, los "Payahop", igual como si estuvieran en "El Elegido", espacio busca talentos de CHV.
Les dieron hasta acalambrarse las manos a los djembe o bombitos, métale paya, agarraron pa'l fideo a los de la tribuna, los del jurado, los rostros de la tele. Fueron diez minutos de tandeo y empezaron a soltar chistes en la onda flaitín, en que salieron al baile la hermana, la mami y las viejas del barrio.
Y vino la preguntita a la barra festivalera sobre el color de los chistes: "¿Con censura o sin censura?". Obvio que sin fue la respuesta del público.
Pasaron por las armas a Bob Esponja y sus gustitos en el ring de cuatro perillas, a Godzilla como papi de un Barney que le gotea el cárter, y a Santa Claus por no rajarse con buenos regalos.
"Les traemos el hip hop y el humor de la población", tiraron Claudio y Fernando, que se ganaron el aplauso del respetable Monstruo, y que se tradujo en que el Rafa y la Caro de Moras se rajaran con Antorcha de Plata y al toque con una Antorcha de Oro.
Eso fue a los 30 minutos de chacotear y tocar los djembes sobre el escenario. Pero los cabros estaban en su noche, y siguieron agarrando pa'l fideo a los que se les plantaran por delante de su imaginación.
Dispararon sin asco chistes y payas filosas sobre la mandanga, el sexo, la delincuencia y unas pinceladas de crítica social, pero con esas vocecitas como de payasito, especialmente la de Fernando, el de las trenzas.
Al final, con ritmo frenético, sin parar, disparando payas y chistes, cumplieron 40 minutos en el escenario de la Quinta Vergara. Y otra vez el tío Rafa anunció que a nombre del público se rajaba con una gaviota, pero de plata. Claudio y Fernando no lo podían creer.
¿Sueño cumplido? De más que sí, pero había más, ya que Caro de Moras anunció la Gaviota de Oro. O sea, llegaron preparaditos y se llevaron todo el premio a la casa.