Johnny Depp, el actor de “Piratas del Caribe” está pasando por problemas brígidos con su esposa Amber Heard, luego de que ésta lo acusara de una horripilante violencia doméstica. Cosa no menor que además de nervioso, puso al artista a buscar consuelo en las parrillás.
El hombrón, de 53 pepas, fue captado en Bethlehem, Pennsylvania, este fin de semana en su peor momento.
En las fotos que le sacaron luce con varios kilos extras. Esta imagen, visiblemente más inflada que en sus años mozos, desató una ola de pelambres y burlas entre los cibersapos.
Y es que los dramas del compadre no son ninguna talla y por algún lado tendrá que desahogarse.
Desde que Amber lo dejó como un monstruo, Depp se vino abajo, se nota que se le abrió el apetito, y hasta se borró los tatuajes que tenía en honor a su ex amada.
En sus nudillos tenía uno que decía “Slim” (apodo de su mujer) y lo cambió por “Scum” (escoria en español). El que tenía en su brazo derecho con la figura de ella, lo enchuló con otro diseño.
En todo caso, no es primera vez que el “Pirata” tiene que entrar a picar en sus tatuajes, pues cuando estaba pinchando con Winona Ryder le pasó la misma tontera. Se había escrito “WinonaForever” y cuando le dieron la PLR lo transformó en “WinoForever”.
