Si se traumaron viendo a Giancarlo Petaccia llorando ayer en su despedida del farandulero Mira Quien Habla (Mega), vaya comprando pañuelos y gladiolos, porque el próximo viernes el programa estira la pata, o sea, se acaba luego de 5 años de existencia.
El equipo fue informado de la pasada a mejor vida justamente un par de horitas antes de que salieran al aire y que el Peta abandonara el buque, cachando que se venía el medio ni que hundimiento. Ni hue...
A las 10.30 horas se citó a sus panelitas, camarógrafos, periodistas, gomas y productores a una reunión con olor a fiambre, que se venía tras varios meses de rumores del corte.
Allí fueron informados de la mala nueva por los mandamases Bibiano Castelló, Fernando Manns y Guillermo Cordero. Sobre el porqué del chaíto definitivo del espacio de copucha, las principales razones que dieron los jefes tuvieron que ver con la no concordancia del contenido pelambriento con la línea editorial de la señal y que era demasiado light para el perfil que se quiere proyectar como canal serio y católico.
Con el queque cortado, los mismos también tranquilizaron al lote, jurándole que sería reubicado en otros cocidos como Mucho Gusto y Secreto a Voces.
Con la toalla tirada a una semana del fin, Giancarlo está tranquilo y sin culpa. "Nadie sabía cuándo terminaba el programa... Yo me estaba saliendo hace tiempo, entonces con mi decisión, independiente de si seguía o no, me hubiese gustado que continuaran mis compañeros, pero yo me tenía que ir igual".
- ¿Por qué no moriste con las botas puestas?
- Era una decisión tomada y mi fecha estaba puesta hace mucho tiempo. Con tres programas (MCC y SAV) se me hace muy difícil. Pero que creo que el MQH no se ha hundido, en cualquier minuto puede volver. Es una pausa, creo, no un término. Ojalá vuelva y mis compañeros sigan ahí trabajando.
Viviana Nunes, fundadora del Mira junto al musculéitor, piensa que hubiera sido "ideal" que el galancete se aguantara una semanita más pa' decir chabela, pero no lo crucifica porque "él hace tiempo venía diciendo que estaba cansado, que no podía seguir".
Para más remate, ella tampoco va estar el día final porque debe viajar a Quillón p' animar un festival, "así que estamos conversando con el canal, para ver qué hacemos... También voy a escapar antes, jajajá...".
En cuanto al cierre del boliche, Viviana dice que no le sorprende, pues "era un tema que ya se sabía, el año pasado habían avisado que en algún momento se iba a terminar, incluso pensé que iba a ser en el verano, después del Festival de Viña".
Andrés Mendoza, el panelista más antiguo, está apenado hasta el tuétano. "Uno trabaja más que compañeros, con amigos. Gente con la que uno pelea, se ríe, pasa todo el día... Siento pena. Fue una decisión tomada hace harto tiempo. Y no es por rating, sino porque los programas cumplen un ciclo".
