Una banda ochentera tocándole en vivo, cualquier mastique y sillas con patas reforzadas pa' más de 300 almas. Así será el matrimonio por la Iglesia que Giancarlo Petaccia tendrá con su amada Fernanda Alarcón, el próximo 5 de noviembre.
La pareja está a full con los preparativos para el festín a realizarse en la espaciosa y bucólica Hacienda Guay-Guay, en el sector de Chicureo, donde residen.
Ella se mandó a hacer un vestido de novia con el diseñador top Luciano Brancoli y él optó por un traje azul marino, sencillito y a la medida con el sastre Sergio Arias.
En el local darán el "yes" ante un curita. De ahí, a celebrar como malos de la cabeza. Giancarlo cuenta al diario pop que será un carrete para pasarlo bien con sus amigotes de toda la vida, de la tele y la farándula.
"Imagínate que esperé 40 años para ese minuto, así que quiero disfrutarlo mucho, juntarme con la gente que quiero y bailar toda la noche o hasta que la gente aguante", detalla sobre su casorio que tendrá mucha onda campestre. "De partida, habrá harta comida para que nadie salga pelando", promete.
Entre los que asistirán se cuentan toda la parentela de ambos, famosillos y varios políticos de derecha por el lado de los papis de Fernanda. "Hay una mezcla muy grande de invitados, se van a sorprender", agrega el novio.
La luna de miel es otro ítem que está listoco. Al otro día del merequetengue se irán a tomar sol a Miami a la casa de unos yuntas. "No sé cuánto tiempo estaremos, viajamos con millas (promoción) así que ahí se verá", nos puso al tanto el ahorrativo Petaccia.
UNA CAFETERA
Para no hacérselas difícil a sus compipas y asegurarse con los regalitos, el Peta y su rucia se anotaron en la lista de novios de una conocida multitienda. Hasta el minuto, sapeamos que lo único que les han regalado del laaaaargo número de especies a elegir es una económica cafetera.