El músico británico anunció que deja la música por tener constantes achaques de salud, que no lo dejan cantar ni componer. El master del rock progresivo señaló a la revista People que "Ya no pertenezco a ese mundo y no creo que nadie vaya a echarme de menos. Estoy mucho más feliz haciéndome a un lado completamente". Los fanáticos de Collins ya están soltando lagrimones por el artista que ha vendido 100 millones de discos en todo el globo.