Porfiado Edmundo volvió al jugoseo

¿Qué sería de nuestro mall de la Justicia sin Edmundo? Una fomedad poh, chorizos. Y ayer fue otra bella jornada en la que el minigalán regaló una nueva postal pa'l álbum que le tienen guardadito en Gendarmería.

La idea era que el encuentro pactado a las 10 de la matina entre Edmundo, Francoise con su paladín, Aldo Duque, y la representante del poli al que el ex chico reality le machucó los nísperos, terminara con un juicio abreviado, pero no se pudo.

Como al parecer la defensora de Varas, Helena Gallegos, lo dejó oficialmente botella, la junta judicial sólo duró unos 30 minutos. El humo blanco por el proceso contra el proyecto de pelotero por romper la orden que le prohibía acercarse a su aún esposa y por el apaleo al carabinero, no salió por ningún lado.

Terminada la audiencia express, Francoise fue la primera en rajar de la sala, sin cachar, para su mala pata, que su ex cuñado, Wladimir Varas, venía justito metiendo las catimbas al segundo piso del edificio A.

Luego de unos 15 segundos en los que el Wladi le dejó la paila colorada tras desembuchar lo mejor de la Huaiquipedia XXX, Francoise aplicó la táctica del aprecue y saspareció. Como detrasito de ella venía su prete, Felipe Barriga, dueño del Club Diosas, el broder del mediometro sexual no tardó nada en sacar pecho y chispearle los dedos al archienemigo de su hermano.

Aniñada que duró menos que el pololeo del Joche con la brasuca, ya que en tres tiempos Gendarmería le puso paños fríos al Varas chico. Pero altirante fue Edmundo quien sacó número para corretear al emprendedor del trasnoche.

"¿A quién vai a matar?" y "ten cuidado con mi hija", fueron parte de la echada de foca que le pudimos entender al ex regalón de Canal 13, a quien como en el centro justiciero ya tienen cachadito, tres uniformados lo rodearon para bajarle los turururus y ponerle los patitos en fila nuevamente.

"Edmundo, cálmate (...) yo lo conozco", dijo uno de los oficiales con corazón de nona, logrando que al ratito Varas respirara hondo, le diera la mano a uno de sus verdes sujetadores y hasta le agradeciera lo aplicadito del servicio.

"Yo estoy para respaldar a Francoise, ustedes vieron, ella salió corriendo, costó mucho que viniera (...) Realmente él no está bien, yo también soy papá, y vivir este episodio, no corresponde. Ni para Francoise, mi hermano (que lo acompañaba) ni para mí", comentó Barriga al diario pop.

Por otro lado, Edmundo asegura que hace rato su rival le anda metiendo el dedo en la oreja y enchufándole ají cacho cabra por el quetejedi. "Este personaje me sacó los choros del canasto, me amenazó de muerte, ayer (martes) provocaron a mi hermano por teléfono. Yo lo encaré porque no sé qué quiere".

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