Chilevisión se las quiere poner pelúa de verdad a los vivarachos de Psíquicos y si no me cree, dígame altiro cómo halla que mande a sus finalistas a encontrar a la desaparecida pitufa británica Madeleine McCann.
Esa es la cotota idea que se pensó y en la que se está trabajando para cerrar con broche de oro la primera temporada del cocido que le hace ojitos al Más Allá.
Y el plan maestro es así: los tres más bacanes del espacio sacarán pasajes directo a Portugal, con la misión de dar con alguna pista sobre la desaparición de la niña, de cuatro añitos por ese entonces. El 3 de mayo de 2007 la pequeña Maddie se esfumó, sin dejar rastro hasta el día de hoy. El trágico hecho ocurrió cuando sus papás estaban de vacaciones ahí y una noche dejaron solos a sus tres retoños para ir a cenar. Cuando volvieron cacharon que uno de los peques no estaba: era Madeleine.
El caso sigue siendo un misterio sin resolver y para los capos del queteconté sería la mayor prueba de fuego para que los brujildos criollos demuestren qué tanto le pegan al sexto sentido. Quién sabe si en una de esas, dan con el paradero de la chiquilla que hoy tendría 9 años. O capaz le echen una mano a los polis ingleses, que justo por estas fechas retomaron el caso y juran que ahora sí que sí llegarán a una respuesta.
La cosa es que la estadía no será pa’l leseo, sino con el loable propósito de aportar sus poderes de sesera a una buena y humana causa.
AFINANDO DETALLES
“Queremos que los tres participantes que lleguen a la final de Psíquicos viajen a Portugal y traten de saber qué pasó con la niña”, explica Juan Pablo González, productor ejecutivo del programa que sólo está a la espera del último visto bueno de los jefazos superiores.
“La verdad es que tenemos el 80% listo para concretar la salida, sólo falta la aprobación completa del canal para realizarlo”, verseó el capo.
Si todo resulta como González y su equipo lo han pensado, en dos semanas el pique a Europa será una realidad.