El cantante español Enrique Iglesias calificó de "rumores" las noticias difundidas recientemente sobre el supuesto embarazo de su novia, la rusa Anna Kournikova.
"Los rumores son parte del trabajo, parte del juego. Y lo único que debe hacer un famoso es reírse de ellos", comentó Iglesias a la cadena de televisión BTV desde Sofía, donde participará en un concierto organizado por un operador de telecomunicaciones búlgaro.
El intérprete de éxitos como "Experiencia religiosa" se refería así a la noticia publicada por un medio gringo y reproducida en otros países sobre un supuesto embarazo de Kournikova.
Iglesias aterrizó anoche en Sofía y se desplazó luego a la suite presidencial de un hotel de lujo.
La prensa local ha dado detalles sobre las exigencias del cantante tanto sobre su alojamiento como sobre el escenario donde actuará ante 30.000 personas.
Así, según esos medios, pidió muebles en estilo barroco y rococó, que cada cinco horas se sirva comida para él y su equipo y una cocina móvil entre bastidores durante el recital.
Horas antes de aparecer ante el público búlgaro, Iglesias declaró a la cadena bTV que no se considera una estrella y que tiene una vida muy normal.
"Me siento como un niño, pequeño y tonto, y no como una estrella. Amo la música", declaró el intérprete de "Bailamos", quien insistió en que la música ocupa el 80 por ciento de su corazón.
