El "Buenos días a todos" ayer fue una fiesta. Karen Doggenweiler retomó su trono después de meses fuera, y Julián Elfenbein volvió de sus vacaciones.
Los recibieron con bombos y platillos, pero Raquel Argandoña no estuvo en la misma sintonía. Mientras las cámaras sólo apuntaban a la pareja mañanera oficial, la madre de Kel lucía a un costado del set amurrada. ¿Qué pashó?
La última hora y media del programa fue reservada para la despedida de Claudia Conserva como reemplazante y, por ende, no le hincaron el colmillo a los temas de farándula, cosa que dejó a la Raca sin salir en pantalla, relegada a un borde del estudio.
La poca pesca indignó a la Quintrala y fue tanta su pataleta, que cuando el productor Leo Jeria la convidó a unirse al leseo tras los comerciales, alegó “¿para qué vamos a ir?, ¿a qué vamos a ir?”.
Con la Raca en llamas, Karencita hacía lo suyo por su lado, chacoteando firme disfrazada de Pimpinela con Julián. Llegó tan prendida que ni cachó el drama que tenía la doña. "Estoy contenta y feliz de reencontrarme con Julián, con la Claudia, que se alargó un poco más su estadía, pero yo solo tengo palabras de gratitud y cariño", soltó con la carita llena de risa.