Los vi, los toqué y hasta les pegué su repasadita en sus depilados cutis. Sí cabras, tuve casi piluchitos a tres guapos de Fiebre de Baile, una especie en extinción en el estelar de bailongo.
Cuando les preguntamos si eran capaces de pintarse todo el cutis para La Cuarta, la verdad es que no lo pensaron mucho y se convirtieron en unos seductores animales. Bueno, no todos. Siga leyendo mejor por que hasta yo me sorprendí.
VALDIVIA ENCANTADOR
Cuando llegamos a la sala de maquillaje, sabía que me podía llevar un impacto de aquellos con tanto cuerpo fornido. No me equivoqué. Claudio Valdivia se robó mi atención de forma permanente, aparte que con su pinturita de tigre me daban puras ganas de que me ronroneara.
Como buena profesional que soy, me encargué personalmente que cada una de las líneas de minino quedaran bien bonitas y parejitas, y hasta me tuve que arrancar de un mordisco de Chanchulín. Grrr.
El chiquillo me sorprendió con tanta disposición y amabilidad a la hora de mirar el pajarito y dejarse acariciar por los pinceles de Issadora Squicciarini, quien antes que yo le diera el toque final lo dejó del uno para que el cabro se luciera.
Cuando el ex de Tanza se las daba casi de gatito de Shrek, soltó que "estoy listo para atacar a una presa morena y rica, Nidyan. Es que está muy buena", remachó. Sobre la marcha se pegó una reculada de aquellas y trajo a su mente a su sensual bailarina Ivanna. Y lea como la definió: "Suavecita, entretenida y linda". Pa' mi que este felino tiene el diente largo.
EL GITANO JUGADO
El que toma todas las micros, hasta las que están en pana, es el gitano Nine. En más de una oportunidad Pili, su artista, tuvo que atajarle las manos porque de cariñoso el cabro tiene mucho.
Cuando me tocó pintarle el chasis al paisano recordé que en mi calidad de mujer comprometida era mejor arrancar.
PATALETA DE URI URI
Debo confesar que mis instintos femeninos apostaban a Uri Uri. Lamentablemnte se las dio de experto en cuerpos pintados, dirigió todo su maquillaje y hasta se pegó una pataleta cuando vio que Valdivia estaba quedando genial.
Luego de eso, pescó su camioneta y se mandó a cambiar. Todos quedamos plop. Al rato volvió y cuando le cambiaron el estilo de maquillaje se enfureció más y le hizo un show a la producción de Fiebre de Baile, con gritos incluidos, intentó posar para las fotos y de un momento a otro pescó sus cosas y se mandó a cambiar. Tan Tan.
