ESTADOS UNIDOS.- Divididos están los cahuineros gringos tras la publicación de la revista Star, que tituló su última edición con la supuesta adicción de Katie Holmes a un aparatito que deja grogui a cualquiera.
La revista asegura que la esposa de Tom Cruise es seca para el "e-meter", muy utilizado por los amantes de la Cienciología, unas creencias más raras que Edmundo y Francoise en buena onda.
El "e-meter emite descargas de bajo nivel que van directo al cerebro y produce una sensación temporal de euforia. Es lo mismo que tomar morfina u otro opiáceo, como heroína u opio", publicó Star.
Al toque reaccionaron otras revistas más serias que aseguran que todo es una triquiñuela para vender más. En todo caso, el "e-meter" sí existe y la FDA (el organismo que regula los medicamentos en Estados Unidos) los autorizó porque "no está destinado a fines médicos".