Una sensación amarga existe entre los participantes de "Fiebre de Baile". Creen que la gente está salvando a los más faranduleros en vez de los que sí tienen talento.
Pruebas concretas de eso fueron las eliminaciones de las despampanantes Jhendelyn Núñez, hace dos martes, y Vivi Rodrigues, esta semana. Ambas terminaron llorando a lorito tendido, sin encontrar explicación a su partida.
En los números, Jhendelyn tuvo que irse a duelo contra Adriana Barrientos, quien sacó el 94 por ciento de los votos frente al escaso 6 de la rancagüina. Por su parte, la garotinha perdió ante el 58 por ciento de las preferencias que obtuvo Pablo Ruiz en el Aquadance.
Ante este panorama algunos de los participantes encuentran que la recta del comentado estelar de Chilevisión hace ratito que extravió la brújula. Así lo afirmaron Carolina Oliva: "La Vivi no debería haberse ido de la competencia. Deberían premiar al que más baile, no el que más llora, más se lesiona o el que es rostro de Chilevisión. Que tomen conciencia de eso".
Kathy Orellana destacó que ahora que quedan menos participantes tiene que ponerle mucho más ñeque porque "no puedo darme el lujo de llegar a los martes (día de eliminación) porque corro mucho riesgo. La Vivi era la única que le podía hacer el peso a la Gianella o a los que bailan bien, y se fue".
También es sabido que los tres jurados, en especial Karen Connolly, están más que empelotados que sus decisiones técnicas, con conocimientos, pesen menos que el voto popular.
