La tele contra el computador. Los 80/90 vs los 2000. Y es que al empezar a escudriñar en medio de las líneas que separan una generación de otra, notamos un sinnúmero de diferencias fundamentales, como ocurre en el caso de los dibujos animados de ayer y hoy
Para quienes nacieron en los 80, Heidi, Candy, Remi, Los ThunderCats o Meteoro son clásicos inolvidables. Fue también el auge de las películas Disney. Y si bien no tenían la calidad gráfica que se aprecia en los monos de la actualidad, siguen estando en la memoria colectiva como símbolos indiscutibles de la cultura pop.
Los nacidos en los 90 seguramente recordarán series inolvidables como Los Rugrats, Pokemon, Dragon Ball Z, Hey Arnold o los Teletubbies. Fue, también, la época en que nacieron las primeras películas en 3D: Toy Story y Bichos marcaron la pauta de lo que sería una revolución en la industria animada propiciada por la empresa Pixar.
Hoy en día, sin embargo, los cabros chicos han crecido con monos totalmente diferentes a los de antes. Porque a diferencia de los que ya están más peluditos, desde temprana edad tienen acceso a un sin fín de caricaturas desde su tablet, celular o computador, lo que les permite ver de corrido varios capítulos de sus monos favoritos y no tener que aguantarse a esperar a que llegue el próximo domingo pa’ cachar si Gokú ganará o no el combate contra Freezer. Tales han sido las ventajas del siglo XXI.
Tampoco tienen la misma credulidad de sus padres y abuelos. Y aunque probablemente Tom y Jerry y Los Supersónicos siguen gustando a grandes y chicos, la revolución tecnológica originada por la internet ha cultivado una generación de cabros chicos mucho más exigentes. Y hasta con gustos totalmente opuestos a los de sus padres, a veces rayando en lo políticamente incorrecto.
Youtube o Netflix, por ejemplo, son las nuevas plataformas en las que se mueven los retoños de hoy, lo cuál ha obligado a la industria de la animación a renovarse constantemente.
Por eso, en ESP nos propusimos la labor de charlar con algunos carachos de la tele pa’ descubrir cuáles monos veían ellos en su infancia versus aquellos con los que rayan sus hijos en la actualidad.
Álvaro Ballero - Los Thundercats y Frozen
El ex Protagonista de la Fama tiene dos hijas de 2 y 5 años. La menor es fanática de Peppa Pig y la mayor no para de cantar las canciones de Frozen, la última películas de princesas Disney que dejó vueltas locas a las niñas del mundo. Por otro lado, a él lo que le gustaba eran los monos del UCV.
“Cuando era chico veía todas las caricaturas que daban en el UCV: Iron Man 28, Marco. Ya más grande rayaba con los Thundercats, Denver el Dinosaurio y los Halcones Galácticos. Los monos son más raros ahora. Como que, a veces, nunca sabes quién es el malo o el bueno. Mi hija mayor también ve en Youtube a una niña que se llama Katia, que viaja con sus padres. Le encanta ver ese programa. A veces incluso se levanta a las 6 AM solo para verla. También es fanática de Frozen y Los Minions. Tanto así, que tengo un CD en el auto con los temas de Frozen”, dice.
Wilma González - Los Picapiedras y Naruto
La potable Wilma González amaba las películas de Disney y los monos típicos de antes; con harta moraleja y linda estética. Pero lo que más le gustaba era sentarse a ver las aventuras de Pedro Picapiedra y su familia. “Me veía todas las de Disney. Y los Picapiedras me gustaban porque la esposa de Pedro llevaba mi nombre”, dice.
Y aunque su hijo lle gustan más las caricaturas con peleas y harta acción, también es fanático de Disney. “Mi hijo siempre ve una serie asiática que se llama Naruto. Y ve hartas películas, le encantan las películas. También le gustan mucho las películas de Disney, salvo las de princesas. Pero las demás las ve todas”. cuenta.
Claudia Conserva - Heidi y Los Teletubies
Claudia es mami de dos varones y admite que ella era re’ buena para ver monitos. Sus hijos, en cambio, son fieles a su generación y todo lo ven por internet.
“Yo veía Heidi, Los Pitufos, La Princesa Caballero, Remi, Candy, Ángel, la Niña de Las Flores, y La Princesa Caballero. Mis hijos, en cambio, están todo el día pegados a series gringas por internet. Pero cuando eran más chicos veían mucho los monitos del Discovery Kids y los teletubies. También les encantaba ver Toy Story y El rey Leon”, dice.
Dominic Gallego - Hey, Arnold! y Ben 10
La sensual Dominic Gallego confiesa que ella, de chica, veía puros monos del cable, especialmente los que transmitían por Nickelodeon.
“Yo no fui muy de monos clásicos, porque cuando era chica veía puro cable. Me veía todos los monos del Nickelodeon, como Rocket Power, Hey Arnold, Los Rugrats, Pikachu. Así que igual no estoy tan desfasada con mi hijo (5 años) generacionalmente, porque a él le gustan los que yo veía. A mí hijo le gustan mucho Ben 10 y Hora de Aventuras, y yo a veces veo Hora de Aventuras con él, porque igual me parecen entretenidos. Aunque me piqué un poco con él, ya que yo veía Dora la Exploradora y a él no le gusta porque es hombre”, dice la morena.
Laura Prieto - Tom y Jerry y Hora de Aventuras
Aunque a la ricarda Laura Prieto le gustaba ver las caricaturas más inocentes y dulzonas, confiesa que le encanta sentarse con su hija de 10 años a mirar los monos de hoy en día, y a pesar de que las temáticas ya no son tan inocentes, es de aquellas mamis que les gusta compartir gustos con sus hijos.
“Yo era bien mamona para ver dibujitos. Me gustaban Los Ositos Cariñositos, la Frutillita, Tom y Jerry. Pero a mi hija le gusta ver Hora de Aventuras y Un Show Más. Para mí, el mejor panorama es ver Hora de Aventuras con mi hija los fines de semana”, dice.
Juan Andrés Salfate - El Pequeño príncipe y el dragón de 8 cabezas y Toy Story 1
Juan Andrés Salfate sabe de monos mucho más que la mayoría de los padres de hoy. Dice que hasta el día de hoy se sienta a ver dibujos animados y opina que no son peores ni mejores que los que daban antes. Simplemente, la industria de la animación se ha adaptado a las nuevas generaciones.
“Lo que pasa es que los monos de hoy son más delirantes, pero igual me gustan”, dice. Sus tres hijos, si bien ya están grandes (el menor tiene 12), tienen gustos similares a los suyos, aunque igual se quedan con los monos de los años 90 en adelante.
“Cuando era niño me encantaba ver El Pequeño Príncipe y el Dragón de Ocho Cabezas, porque traía toda la fantasía épica de aventuras. También me gustaron Meteoro, el Goku de los 70, George de la Selva y Mr. Magoo. Mientras que a mi hijo mayor le encantaba ver “Toy Story 1”; el del medio, “El Gigante de Hierro”; y al más chico le gusta “La Familia del Futuro”. Pero yo hasta ahora me siento con mis hijos a ver dibujos animados”, suelta.
