La actriz y cantante Selena Gomez, quien pisaba por primera vez Chilito, hizo saltar y llorar a los más de 13 mil fanáticos que repletaron de bote a bote anoche el Movistar Arena.
Histeria colectiva es la palabra que mejor define lo que causó Selena entre los pitufos. La estrella de la factoría Disney, cortada con la misma tijera que dio vida a los Jonas Brothers y Hannah Montana, partió su show a las 21 horas en punto.
El brillo duró cerca de una hora, en donde hizo un recorrido por los mejores hits de sus dos discos.
La actriz partió canturreando Round & Round, y en un español medio chamullado, soltó que sacaría un nuevo disco en español, para volver a pisar tierra chilena y reencontrarse con su fiel fanaticada.
Selena, quien estaba acompañada por la banda The Scence, cerró su concierto con el hit Magic, que sacó hasta lágrimas de sus seguidoras, que terminaron sin voz ni ganas de saltar tras el movido concierto.
Entre los famosillos que pisaron el lugar se encontraba un motivado Fernando Solabarrieta, quien cantó junto a su hija Maite. Por su litro, Carlita Ochoa también acompañó a su hija al brillo, pero al ver a la prensa apretó cachete y huyó del lugar.