Con lo deliciosa que es muchos creerían que estar casado con Megan Fox es sinónimo de movimiento en el ring de cuatro perillas a cada rato, pero nones...
Eso al menos sopló la actriz al cocido Entertainment Tonight, frase que dejó con la tarasca abierta a todos los machos que soñarían con pegarse su revolcón loco con la preciosura.
"Él (Brian Austin Green, su marido) y yo no tenemos ningún tipo de intimidad", expresó la diosa en el estreno de "Las Tortugas Ninjas", donde ella le pone color como April O'Neil.
Aunque los más mal pensados altiro hablaron de una crisis en la pareja, lo cierto es que lo que más complica a los cabros pa' hacerse cariñito es que la Megan tiene la agenda copada, por culpa de la promoción de la peli con los mutantes. Y, pa' sumarle más, debe cuidar a sus dos bebés, de 22 y 5 meses.