Sólo el poder de la tele a color hizo que Sigrid Alegría fuera mechoneada y conociera la universidad por dentro, sin quemar ni una mísera neurona.

La actriz lleva su buen tiempo reconciliándose con los cuadernos que mandó a la miércale apenas salió de cuarto medio, para dar en el tono con su papel en la próxima teleserie "Mamá Mechona" (Canal 13, 20 horas). En ese entuerto le presta el cuerpo a una cuarentona que decide estudiar psicología. "Macarena" da la PSU y entrará por un tubo a las aulas del saber, experiencia terrible de nueva pa' la Sigrid, que en sus tiempos mozos nunca dio la antigua Prueba de Aptitud Académica (PAA), por considerarse entera de porra.

"No di la PAA por vergüenza. No me atreví porque, la verdad, es que nunca fui buena alumna. Para mí la prueba era un desafío para saber si se era inteligente o no, si tienes buena memoria o no, entonces no quise exponerme a eso. No me atreví, era exponerme a pasar por tonta", asumió sobre su época de colegiala al tres y al cuatro.

- ¿Qué ramos te tuvieron más pa’ la corneta?

- Historia para mí era espantoso, porque no retenía nada, ni nombres, ni fechas. No era capaz. En lo que sí me iba bien era en matemáticas, física, que eran ramos que me gustaban mucho.

-Tenías que puro ser ingeniera de obra gruesa...

- Jajajá. Lo bueno es que el lugar donde quería estudiar teatro no me pedía la PAA, así que me metí y listo.

- ¿De más grandulona te dieron ganas de poner la rayita en la PAA, o en la actual PSU?

- Sí. Cuando empecé a trabajar como actriz tuve dudas de si lo estaba haciendo bien o no, si tenía algo que aportar. En ese minuto me dije no me voy a exponer a que me critiquen y voy a estudiar psicología.

- Igual que la comadre de “Mamá Mechona”...

- Claro, y en eso estaba cuando mi familia me dijo “estái loca”, lo haces súper bien actuando. Pasó también que en paralelo me seguían invitando a actuar y, bueno, parece que no era tan mala actriz, jajajá. Desde entonces lo empecé a disfrutar.

- ¿Y grabando la telecebolla te han dado ganas de estudiar?

- De estudiar otra carrera, no. Sí estudiar un instrumento, digitopuntura y masajes, dirección de actores, todas cosas para enriquecerme. Para otra cosa tengo pésima memoria, aunque cueste creer.