Luego de un mes de basureo, Roman Reigns finalmente conquistó el título de la WWE al aforrarle en una polémica pelea a Sheamus, quien le dio dura batalla al interior del ring.
El primo de "La Roca" estaba en la obligación de ganar para mantenerse en la compañía, ya que si perdía se iría con la mansa PLR de la empresa de lucha.
Cuando tenía la pelea ganada, se metió el dueño de la compañía, Vince McMahon, quien le quiso mufar la pelea. Pero finalmente, el luchador salió airoso y cumplió el sueño de todo empleado: aforrarle al jefecito, ito, ito y salir victorioso. ¿Qué tal?