El cocido que por años se dedicó a hincharle los pollitos a los peces gordos de Chilito, ''CQC'', retornó tras cuatro años de congelamiento, pero en onda ''Minimí'', sin darse el lujo de una hora con tres panelistas y varios noteros irreverentes como fue en la pantalla de Mega hasta 2011.
Así lo quiere ahora su guaripola, Nicolás Larraín, quien por lucas y libertad decidió hacerlo en Internet a través del sitio El Telon.cl y la aplicación que se descarga en Android o IOS para verlo en la tablet o el celu.
Esta vez el canoso de la voz aguardentosa no está acompañado de los avezados Gonzalo Feito ni Iván Guerrero, sólo del notero Roberto van Cauwelaert y se siente ''la raja y emocionado'' con el retorno y se anota con tres notas cortitas, la más larga de 10 minutos 15 segundos, donde les dan a los guaripolas de la ANFP, los senadores y al mismísimo ''Rey'' Arturo Vidal.
''Este retorno es en un formato distinto, por lo tanto no tiene la presión de la televisión abierta, es otro mundo que hay en Internet que nos está dando casi más satisfacción que en la televisión abierta. Esto porque este público de Internet es más leal, es gente que se sienta a ver televisión y la mitad nos quiere y la otra nos odia'', soltó Nico Larraín.
- ¿Y cómo evalúa la vuelta, másterx?x
- Es muy positiva la apuesta de meter estas notas por Internet a través de la aplicación El Telón, que es una especie de Netflix chileno, pero que no se paga, que es gratis. Estamos adecuándonos a este nuevo lenguaje de llegar al público a través del computador, del celular y de la tablet.
- ¿Está por ahí la mano de la nueva televisiónx?x
- Ha estado por ahí hace mucho tiempo, en lo que son los mercados de nicho. No es una televisión tan masiva, tan grande. Estos son nichos, en que sabemos y conocemos qué tipo de gente nos ve, qué es lo que quieren. Y la televisión abierta tiene que transmitir grandes espectáculos, grandes partidos y shows. Pero hay que adecuar los costos como lo hizo la radio en su momento, que antes tenía grandes voces y personajes, pero eso pasó y ahora hay mucha radio, variada y llena de cosas. Y la gente no gana ya los súper sueldos de antes en la radio, porque hubo que adecuar los costos.
- ¿Y eso va para la telex?x
- Claro, tenemos el caso de TVN, que tendría que vender su edificio y poner un gallo a programar contenidos de bajo costo y echar a todos los directores y gente de programación porque no puede haber 20 personas que ganen tres a cuatro millones de pesos cada uno para discutir qué hacemos con dos o tres puntos de rating. Eso es absurdo.
- Pasar de ''CQC'' producido en Mega a este de El Telón implica un pequeño gran cambio, ¿nox?x
- Sí, porque se desmembró un programa que tenía tres conductores en un estudio grande con público y me voy yo solo a un estudio muy pequeño y no tengo a Guerrero y Feito al lado, por lo tanto hay bajo costo. Y nos quedamos con la esencia de eso: con el chiste o el comentario de actualidad que hacía el conductor y con las notas en que se encara al autoridad. La gente nos pedía enfrentar y ponerle el micrófono al político para que la gente por lo menos lo vea sonrojarse o poniendo la cara. Y eso está funcionando, porque hemos tenido mucho apoyo. Y lo principal es que hemos tenido el apoyo de las marcas.
- ¿Rating por marcasx?x
-Ese ha sido el error de los canales de televisión, que se han esmerado en vender rating y lo que hay que vender son marcas. Creen que sus clientes son las dueñas de casa, los adolescentes, etcétera… y están equivocados. El cliente son las marcas, como las grandes tiendas, las empresas de telefonía. Esos son los que le pagan el sueldo a los rostros y los animadores, entonces hay que sentarse con las marcas y ver qué quieren comunicar. Desde que se fue “CQC” de la televisión, nadie le pone el micrófono a la autoridad para que reconozca que metió las patas, como en el caso Caval.
