¡La payasá pa' grande! Teniendo a Chilito al ladito, a todos los famosos les dio con entrar a la industria vitivinícola...en Argentina ¿?.
En la tarde de este miércoles se supo que Robert De Niro andaría sapeando un terrenito de 40 hectáreas en Tunuyán para producir su propio vinito.
Según los cahuines ya le tiene hasta nombre al vinacho, al que llamaría "Rodrigo Mendoza", tal como su personaje en la película "La Misión" de 1986.
El negocio aún no estaría cerrado, pero sólo faltarían los flecos como dirían los dirigentes e del Barza y el Udinese.
La idea del actor sería que los vinos de su nuevo emprendimiento se vendan exclusivamente en su cadena de restaurantes Nobu, que cuenta con locales en Londres, Nueva York, Los Ángeles, Hong Kong y Honolulu, entre otros países.
Si este cuento es cierto, uno de los más bacanes de Hollywood, se sumaría a la nueva tendencia en marketing vitivinícola, el de los vinos con rostros de famosos.
LOS QUE NO AGUANTARON LA TENTACIÓN
¡Ah! Pero De Niro no es la primera celebridad cae en las garras de la industria vitivinícola al otro lado de la cordillera. Sin ir más lejos, en abril Mendoza "colacsó" con la llegada de Bono, el líder de "U2", para comprar un par de viñedos.
Joan Manuel Serrat tiene un acuerdo con la bodega Familia Zuccardi para la distribución exclusiva en Argentina de los vinos premium elaborados por la bodega española Mas Perinet, propiedad del cantautor catalán.
Ricardo Arjona fue otro de los que cayó y en uno de sus viajes Mendoza encargó a la enóloga Susana Balbo varios varietales que llevan el nombre de una de sus canciones: Santo Pecado.
Chayanne es otro de los que componen la lista. El chiquillo compró 30 hectáreas en el Valle de Uco para hacer su propio malbec. La finca está ubicada en El Cepillo, San Carlos.
