Yann Yvin mide la delantera de las chilenas con un abrazo

En un verdadero galán se ha tranformado el chef francés Yann Yvin, hombrón que saltó a la fama por ser jurado de Masterchef Chile. Desde entonces, disfruta del cariño de la barra pop, sobre todo de la femenina, a la cual ha tenido más cerca este último tiempo por ser candidato a Gran Compipa Guachaca 2016.

Sus 20 años en el terruño le han valido para mimetizarse con el disparatado galán nacional. La Cuarta conversó a colaless quitado con el europeo de los sartenes  y soltó toda su faceta de macho alfa y chicha fresca, frente a tanto piropo que le llega: “Me siento muy bien, dentro de mi salsa como cocinero, me siento bien, no tengo ningún rollo”.

- ¿Cómo se define en buen chileno?

- Soy un hueón normal como dicen acá y con gente totalmente normal me siento muy bien, esa es mi base.

- ¿Qué siente cuando le tiran el churro?

- Eso me pasaba en Europa, pero solamente en la noche jajajá.

- Sabemos que acá le pasa día y noche...

- Es agradable, claro que es algo que te sube el autoestima, es algo bonito, la mujeres son muy cariñosas. Como digo muchas veces, las mujeres chilenas son muy cariñosas.

- Cuente qué le han hecho las amorositas.

-  El abrazo chileno es cariñoso. Cuando llegué hace 20 años, me complicaba abrazar a las mujeres con sus pechos que vienen de frente y uno los puede sentir. No hallaba como ponerme.

- ¿Aprendió?

- Ahora lo disfruto totalmente, pero no hay segundo sentido ni nada, pero ahora ya diferencio tamaños. jajajá. Uno calcula un 90B, jajajá.

- ¡Qué seductor!

- Todos nos levantamos en la mañana para seducir, en su término general, tenemos que hacerlo con nuestra pareja, nuestros hijos, nuestros colegas de trabajo, nuestros jefes y clientes.

- Ser galán le ha servido hasta pa’ salir en la publicidad de una marca de ropa...

- Me gusta mucho tener distintas facetas, no tener etiqueta, además el chileno es muy clasista, entonces te ponen etiqueta en todo, este es así, este es asá. Lo bonito es poder hacer mil cosas. Lo que sí, hago lo que yo quiero, nadie me dice nada, ese es mi lujo hoy, puedo hacer lo que quiero y cuando quiero.

- ¿Qué le queda por hacer por acá?

- Estoy abriendo una tienda de quesos, donde quiero juntar los mejores quesos chilenos, los que nadie conoce.

- ¿Cuáles son esos?

- Son los que están en Chiloé, con leche de oveja, de cabra, de vaca, de todos tipos. Estoy muy interesado por la defensa, cómo lo he dicho, cultural campesina chilena, donde la gente que saca leche vive de eso y produce algún producto.

- Güeeena... ¿Cómo va el negocio?

- Fui a ver a cada uno de los productores en su campo, vi como trabajan, cómo podemos armar un producto de calidad y cómo yo lo puedo traer y así poder sacar este producto un poco de la frontera chilena, que es algo que les hace falta a los pequeños productores.

- ¿Dónde le puedo probar el producto?

- Tendré un local acá en Santiago, pero falta un pelito para que eso se haga efectivo.

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